Seamos mensajeros de la Vida es la exhortación a los paranaenses. El Arzobispo de Paraná, Juan Alberto Puiggari, dirigió unas palabras a quienes trabajaron en la campaña a favor de las dos vidas. Allí pone de manifiesto su agradecimiento por las tareas realizadas hasta el momento e invita a seguir adelante. No solamente en lo concerniente al proceso legislativo que se lleva adelante, sino también en un compromiso permanente con el tema.
Lo que sigue son sus palabras textuales.
Seamos mensajeros de la Vida
Muy queridos hermanos:
En estos momentos en que la Argentina se encuentra discutiendo la legalización del aborto libre, la cual obtuvo la media sanción de la Cámara de Diputados, quisiera dirigirme a todos los fieles dela arquidiócesis, y muy especialmente a aquellas personas que en estas últimas semanas han trabajado con pasión para defender ante el Congreso de la Nación la vida de las madres y de los niños por nacer.
La tarea tan noble de “Salvar las dos vidas” justifica de por sí todo el esfuerzo invertido, las noches sin dormir, la disposición a organizar actos, a asesorar a quien lo pidiera, a rezar por las mujeres embarazadas y por los bebés en la panza de sus mamás, así como también las energías puestas al servicio de esta misión. Sepan que les estoy enormemente agradecido por esta misión tan profética, y que los he tenido permanentemente en mi pensamiento y oración.
A pesar de que el dictamen haya sido aprobado en la primera instancia legislativa, estoy seguro de que todo este gran esfuerzo ya está siendo capitalizado por el Señor y en algún momento dará sus frutos en la historia, para el bien de las madres y de los niños por nacer.
La unidad y dedicación de ustedes en su empeño de cuidar las dos vidas ha sido un modelo de trabajo en la Iglesia que nos ha edificado a todos. Por eso quisiera confirmarlos en esta misión, y pedirles que sigan adelante con ella. Falta mucho aún; no sólo la etapa del Senado que comenzará en breve, sino que también se presenta, pase lo que paso, una tarea muy importante de formación y acompañamiento a las mujeres y a los más jóvenes, para que el cuidado y respeto por la vida humana no se pierda en nuestro país: al defender esto, ustedes están brindando un gran servicio a toda la sociedad.
Les pido que en todas las comunidades puedan generar espacios de oración y anuncio en favor de las 2 vidas, que en cada capilla de adoración perpetua puedan ofrecer un tiempo para pedir por la vida de las madres y de los niños por nacer. Seamos hoy más que nunca mensajeros de la Vida.
Los encomiendo con gratitud al Dios, para que Él los inspire y los fortalezca, y así ustedes puedan dar un testimonio del Señor que con su muerte y resurrección nos regaló el poder vivir para siempre. También a María, que supo custodiar la vida de su Hijo, y hacer todo lo que estuvo en sus manos para salvarlo. Le pido ese mismo don para todos ustedes en su defensa de la vida.
Un gran abrazo, en Cristo.
Mons. Juan Alberto Puiggari
Arzobispo de Paraná