A través de la Agencia Informativa Católica Argentina (AICA) se anunció que dos nuevos sucesores de los apóstoles apacentarán Iglesias Locales argentinas. Se trata de cubrir las vacantes en la Diócesis de Gualeguaychú y en el Obispado Castrense.
Héctor Luis Zordán Obispo de Gualeguaychú
El Padre Héctor es un religioso miembro de la congregación de los Misioneros de los Sagrados Corazones de Jesús y de María. Este santafesino de 60 años en estos momentos era el párroco de Nuestra Señora de los Dolores, en el barrio porteño de Caballito.
Nacido en Calchaquí (Santa Fe) hizo profesión perpetua en su congregación el 14 de agosto de 1.983. Entre sus estudios eclesiásticos podemos destacar su cercanía a su nuevo destino pastoral: cursó el Profesorado en Ciencias Sagradas en la Abadía benedictina del Niño Dios en Victoria.
Ordenado sacerdote en 1984, realizó tareas pastorales al interior de su Congregación y fue postulador de la causa de beatificación del siervo de Dios Pascual Pirozzi. Para más datos, recomendamos leer la biografía que nos presenta AICA.
Santiago Olivera, Obispo Castrense
AICA también nos informa de la designación del porteño Santiago Olivera como Obispo del Ordinariato Castrense.
Mons. Olivera es Obispo de Cruz del Eje desde el 7 de diciembre de 2008. Entre sus tareas pastorales, además de lo que normalmente hace un Obispo en su Iglesia local como pastor de su rebaño, podemos destacar su papel en la canonización del Cura Brochero y en la causa de canonización de Mama Antula (la sierva de Dios María Antonia Paz y Figueroa). En la actualidad es el presidente de la Comisión Episcopal de Comunicación Social de la CEA.
Con la designación de Mons. Olivera al frente del Ordinariato Castrense se cubre una vacante de 10 años originada por la renuncia por límite de edad del Obispo Antonio Juan Baseotto. Dicha renuncia se presentó al Papa el 15 de mayo de 2007, durante la presidencia argentina de Kirchner. Desde entonces al frente del obispado castrense quedó monseñor Pedro Candia en calidad de administrador diocesano. De esta manera, se regulariza una situación anómala entre la Argentina y la Santa Sede.
El Obispado Castrense fue creado merced al Acuerdo entre la Nación Argentina y la Santa Sede en el año 1957 y actualizado y modificado en el año 1992. Tiene como misión la evangelización, mediante la atención docente, sacramental y pastoral, de los fieles católicos que pertenecen al Ejército, a la Armada, a la Fuerza Aérea, a la Gendarmería Nacional y a la Prefectura Naval Argentina, además del personal de los Ministerios de los que dependen y de los miembros de sus familias.