El Papa Francisco nos invita a mirar a nuestro alrededor y descubrir el rostro de quienes "están agobiados, especialmente los pobres, los refugiados y los marginados, para que encuentren acogida y apoyo en nuestras comunidades".
Esta fue su intención para la oración de este mes de febrero:
“Vivimos en ciudades que construyen torres, centros comerciales, hacen negocios inmobiliarios… pero abandonan a una parte de sí en las márgenes, las periferias.
Son muchos los que tienen que luchar para vivir. Y a menudo, para vivir con poca dignidad.
Como consecuencia de esta situación, grandes masas de la población se ven excluidas, se ven marginadas: sin trabajo, sin horizontes, sin salida.
No los abandones. Pide conmigo por aquellos que están agobiados, especialmente los pobres, los refugiados y los marginados, para que encuentren acogida y apoyo en nuestras comunidades.”
Recemos también nosotros.